El buen dormir podría venir acompañado de más años de vida. Un estudio realizado con 15.638 personas de entre 65 y más de 100 años encontró una posible relación entre la calidad del sueño y la longevidad.
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Los investigadores de
La información fue obtenida de un censo realizado en China. Del total de los voluntarios, 3.927 tenían entre 90 y 99 años y 2.794 contaban con 100 o más años de edad. Los participantes venían de distintas provincias del país, algunas de las cuales se encontraban muy distantes entre sí.
El sueño de los voluntarios se definió a partir de una serie de preguntas destinadas a averiguar la cantidad de horas que dormían por día y la calidad de su descanso, incluyendo las siestas.
El 65% del total de los voluntarios (todos adultos mayores) dijo que la calidad de su sueño era buena y muy buena, e informó que descansaba alrededor de 7,5 horas por día. Este porcentaje fue mejor para los más ancianos, ya que los participantes que tenían 100 años o más mostraron posibilidades 70% mayores de decir que disfrutaban de un sueño de buena calidad, en comparación con las personas de
La situación fue diferente para los hombres y las mujeres, ya que ellos tuvieron una posibilidad 23% mayor que ellas de comentar que descansaban bien.
A su vez los autores encontraron una relación entre la calidad del sueño y la salud, ya que los voluntarios que comentaron que su salud era mala tenían una posibilidad 46% menor de decir que descansaban bien. Los participantes con ansiedad, alguna enfermedad crónica o que tenían dificultades para sobrellevar el día a día también mostraron un riesgo mayor de dormir mal.
"La mayor parte de los ancianos sanos experimentaban una calidad de sueño satisfactoria. Los problemas en el descanso en los adultos más mayores probablemente surgen por una variedad de factores fisiológicos y psicológicos más que por el envejecimiento en sí", concluyó Danan Gu, uno de los autores.
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