Grupos de oftalmólogos desarrollan una variedad inteligente de lentes, capaz de podría medir la presión del ojo y hasta de administrar medicamentos.
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Los lentes de contacto se usan, por coquetería o comodidad, en reemplazo de los más aparatosos y visibles anteojos. Sin embargo, se está desarrollando una variedad "inteligente" que podría medir la presión del ojo y administrar medicamentos cuando sea necesario.
Cabe aclarar que estos nuevos dispositivos ya se fabricaron y se probaron en los laboratorios, pero recién ahora se empezará a ver si funcionan como corresponde en los seres humanos.
Esta promesa sería más que bienvenida por las personas con glaucoma, una enfermedad que genera un aumento muy marcado en la presión intraocular y que constituye la segunda causa de ceguera en el mundo.
Los científicos que están diseñando los lentes "inteligentes" pertenecen a la Universidad de California, Estados Unidos. Ellos lograron ubicar nanopartículas de plata, es decir componentes muy pero muy pequeños, en puntos específicos de un lente fabricado con polidimetilsiloxano (PDMS). Estas partículas diminutas se comportan como cables conductores de electricidad capaces de detectar cambios en la presión que proviene del interior del ojo.
Si todo sale como los especialistas esperan, la información se podría enviar a una computadora para que la analice y almacene.
Todos estos datos también contribuirían a que los médicos entiendan mejor a una enfermedad tan grave como el glaucoma. Los investigadores destacaron que sería muy útil medir la presión ocular en cada momento del día, porque creen que los ayudaría a prevenir la ceguera en muchos pacientes.
Además, aseguraron que en el futuro será posible usar pequeñas descargas eléctricas para liberar medicamentos directamente desde los lentes de contacto. La persona con glaucoma no sentiría absolutamente nada, pero estaría recibiendo los fármacos adecuados, en el momento justo y directamente sobre su ojo.
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